Seguramente ya estás super consciente de que hacer un presupuesto es básico para manejar bien tus finanzas. Tal vez quieres organizar tus gastos para frenas las compras innecesarias o decidiste que es momento de empezar a ahorrar y no perder más tiempo.
Si ya estás listo, pero ahora no sabes por dónde empezar, ¡aquí te ayudamos! “Hacer un presupuesto” para principiantes comprende 5 pasos que podrá seguir incluso la persona más novata en temas financieros. Además, incluimos un formato gratuito y descargable para que dar seguimiento a tu presupuesto y enfocarte.
¿Qué es un presupuesto?
Muchas personas escuchan la palabra “presupuesto” e inmediatamente piensan en privaciones y frustración por no poder comprar todo lo que quieren. Esto es un gran error.
Hacer un presupuesto no se trata de privarnos de las cosas que nos gustan; ¡al contrario! Se trata de organizarnos para alcanzar nuestras metas.
Si tú eres quien controla tu dinero -y no al revés- verás que no es complicado llevar tus finanzas al destino que quieres. Que puedes organizarte y dejar de vivir tronándote los dedos o sin saber a dónde se fue la quincena que ni cuenta te diste cuando se acabó.
No caigas en la trampa de creer que el dinero es malo o que estás destinado a nunca tener suficiente. Tampoco te compres la idea de que no eres capaz de manejar tus finanzas para sacarle provecho a tus recursos. ¡Todos somos capaces!
Cambia tu actitud hacia el dinero y enfócate en lo que sí es posible:
- Hacer tu presupuesto
- Controlar tus gastos
- Comenzar a ahorrar
- Sacar provecho a tus ahorros
- ¡Alcanzar tus metas!
“Hacer un presupuesto” para principiantes
Hacer un presupuesto es un proceso que se parece a recibir un aumento. Al detectar los gastos en las áreas que son menos importantes para ti y limitarlos, tendrás más dinero para aplicar en temas que te interesen más. ¡Tú decidirás a dónde va tu dinero!
Así que, sin perder más tiempo, empecemos con los 5 pasos que deberás seguir:
1- Identificar tus metas
Si estás interesado en hacer un presupuesto probablemente tienes una idea de hacia dónde quisieras llevar tu dinero. Tal vez quieres tener más recursos disponibles para viajar o necesitas remodelar tu casa. A la vez, es probable que ha hayas notado que tu dinero actualmente se mueve hacia no debería. Por ejemplo, has notado que gastas mucho en comida preparada o en compras en línea que no son tan necesarias.
Cuando pienses en tus metas, sé muy específico. Los objetivos de muchas personas normalmente son vagos o poco específicos y esto es un error. Mientras más datos tengas claros, más sencillo será establecer metas y más motivado estarás para hacer tu presupuesto y respetarlo hasta lograr tus objetivos.
Si sabes que necesitas hacer un presupuesto y ahorrar, pero no tienes muy claro para qué, en nuestra publicación Cómo ahorrar con propósito te damos algunas buenas ideas para que tengas un objetivo hacia donde ir.
2- Tener a la mano los recursos necesarios
Para seguir este proceso solamente necesitas algunos recursos y la buena noticia es que seguramente ya los tienes en casa.
- Primero, necesitas los estados de cuenta de tus tarjetas de débito y crédito de los últimos 3 ó 4 meses, para que puedas analizar cuánto dinero te entra y en qué lo has gastado.
- Tener a la mano una calculadora. No tiene que ser científica; la calculadora de tu teléfono es suficiente.
- Vas a necesitar un formato para llevar tu presupuesto ¡y aquí te tenemos uno gratuito y listo para descargar!
Descarga el formato Presupuesto mensual
3- Hora de sumar y restar
Para llenar el formato de presupuesto mensual debes considerar lo siguiente:
- Determina tu ingreso mensual. Si la cantidad es variable, anota en el formato lo menos que tienes garantizado que te ingrese por mes.
- Enlista los gastos que tienes. Empieza por tus gastos fijos, es decir, aquello en lo que sí o sí debes gastar cada mes: hipoteca o renta, luz, agua, gas, gasolina, teléfono, alimentos, seguros y ahorro e, incluso, internet.
- A tu ingreso mensual réstale el total de tus gastos fijos. Esta primera cantidad es el dinero que tienes sobrante para tus chuchulucos una vez que cumpliste con todo lo obligatorio.
- Anota en el apartado de egresos las cosas en las que gastas pero que no son básicas para funcionar, como Netflix, el gimnasio, Uber, comida a domicilio y demás.
- Suma esta cantidad y réstasela a tu dinero libre para chuchulucos. El total tendría que ser $0 pesos o un número positivo.
Con el dinero que te sobra una vez que cubriste tooodos tus gastos puedes hacer lo que quieras. Lo mejor sería, obviamente, sumarlo a tu ahorro y posteriormente invertirlo. De esta forma este dinero estaría también trabajando para ti, dándote intereses y acercándote a tus metas.
Sin embargo, si la cantidad que te da es negativa, cuidado, son malas noticias. Esto quiere decir que estás gastando más de lo ganas y ésta es la forma perfecta de endeudarte, abrir un hoyo para tapar otro, crear una gran bola de nieve de intereses y meterte en muchos problemas.
¿Qué pasa si el resultado es negativo?
Si este es tu caso tienes que trabajar en dos objetivos:
- Recortar los gastos extra -los gustitos- y enfocarte en gastar exclusivamente en lo necesario. Ni modo, es momento de apretarte el cinturón.
- Segundo, tratar de incrementar el dinero que ganas, ya sea logrando un aumento de sueldo o generando ingresos extra que sumen a tu cartera.
Para esto sirve hacer un presupuesto: para no salirte del camino y gastar de más. Para ordenar tu dinero y enfocarte en cubrir tus gastos, tus gustos y generar ahorro.
4- Hacer un plan para reducir deudas
Si al hacer un presupuesto encuentras que tus deudas son más altas de lo que puedes manejar, necesitas un plan para controlar los daños.
Existen varias estrategias que puedes seguir, pero lo principal es evitar que las deudas no sigan creciendo. Para esto puedes, por ejemplo, hablar con los bancos y reestructurar tus saldos negativos. De esta forma los intereses se congelarán y la bola de nieve dejará de crecer.
También debes hacer una estrategia de pagos. Ya sea que decidas abonar primero a las tarjetas con intereses más altos o ir terminando primero con las deudas pequeñas y avanzar hacia lo grande, es importante que tomes cartas en este asunto.
5- Concretar un plan de ahorro
En tu presupuesto siempre, siempre, siempre debes considerar un plan de ahorro. Incluso si estás pagando deudas, debes tener un plan de ahorro, aunque sea solamente para cubrir emergencias.
Sofía Macías y el Pequeño Cerdo Capitalista hablan de la estrategia “Quítamelo que me lo gasto” para ahorrar sin que ningún pero se te atraviese. En pocas palabras, consiste en poner el ahorro como prioridad en la lista, o sea en la parte de los gastos fijos, y no como un buen propósito una vez que gastemos en todo y si es que nos sobra dinero.
Si quieres saber más sobre esta estrategia checa esta publicación y concreta un plan de ahorro dentro de tu presupuesto cuanto antes.
De principiante a experto
Todos queremos más diversión, más compras, estrenar lo que nos gusta. Sin embargo, necesitamos ajustar nuestro modo de vida a nuestro ingreso real o jamás lograremos nada de lo soñamos.
Como en todo, al hacer un presupuesto la práctica hace al maestro. Si eres novato, enfócate en hacer este presupuesto mensual y en apegarte a él para empezar. Con el tiempo, podrás ir corrigiendo otros comportamientos y adoptando mejores prácticas financieras.
El chiste es no dejar pasar más tiempo y empezar cuanto antes.
